La ergonomía es el estudio científico de las personas en el lugar de trabajo, con el objetivo de mejorar la eficiencia y la productividad.
Cuando se trata de sillas de oficina, una talla no se ajusta para todos.
Las sillas ergonómicas a menudo se ordenan según las especificaciones de un individuo y permiten un alto nivel de ajuste para ayudar a apoyar la tarea en cuestión.
Esto incluye a menudo un mecanismo inteligente diseñado para estimular más movimiento durante su jornada laboral, brazos totalmente ajustables, ajuste de altura del asiento y soporte lumbar ajustable o inflable.
Los ergonomistas observan cómo las personas interactúan con su entorno de trabajo, y luego trabajan en estrecha colaboración con los diseñadores para crear soluciones que resuelvan los problemas comunes del lugar de trabajo.
Una silla ergonómica toma en cuenta todos estos principios para ayudarte a trabajar de la manera más efectiva y cómoda posible.
Cuando se configura correctamente, esto significa que la silla realmente puede ayudarle a adoptar y mantener una mejor postura de trabajo, protegerle de problemas relacionados con una mala posición y ser más productivo durante su jornada laboral.
Ajuste del ancho y profundidad del asiento.
Ajustar la profundidad de su silla determinará cuánto apoyo recibirán sus muslos.
Para verificar la profundidad de su asiento, siéntese lo más atrás posible en su silla.
El espacio que necesita entre la silla y la parte posterior de sus rodillas es aproximadamente de tres dedos de ancho.
Una silla ergonómica tendrá un deslizador de asiento para que pueda lograrlo fácilmente.
Asimismo, su asesor de ventas podría especificar adiciones como un recorte de coxis o un asiento de espuma de memoria para reducir la presión en la base de la columna vertebral.
Ajuste de altura del asiento
Una silla ergonómica tendrá un elevador de gas para que pueda ajustar la altura a la que está sentado.
La altura correcta significa que sus antebrazos están en línea con su escritorio;
Si sus pies no permanecen planos en el piso en esta posición, entonces necesitará un reposapiés.
Apoyabrazos totalmente ajustables
Los apoyabrazos apoyan los hombros y evitan la tensión en todo el brazo.
Deben ajustarse para que haya un cómodo ángulo de 90 ° a través del antebrazo cuando los hombros están relajados.
Los reposabrazos ergonómicos generalmente tienen un ajuste de ancho para que puedan permanecer cerca del cuerpo.
La parte superior del reposabrazos también puede girar para que pueda sentarse lo más cerca posible del escritorio.
Soporte para la espalda
El respaldo de una silla ergonómica es ajustable en altura para que pueda ofrecer el máximo soporte a la región lumbar de la columna vertebral.
La forma y el tejido pueden variar según el principio ergonómico que intenta lograr, pero todos ofrecen un buen nivel de soporte para que coincida con los contornos de la columna vertebral.
Si la silla tiene un mecanismo incorporado, como un mecanismo de inclinación, esto también significa que su columna vertebral permanece apoyada mientras se mueve durante el día.
Tela
El asiento, los reposabrazos y los respaldos deben estar bien acolchados para garantizar que el cuerpo del trabajador no presione incómodamente el marco de la silla.
El acolchado debe ser firme en lugar de suave y de buena calidad para garantizar que la silla permanezca cómoda durante un tiempo razonable.
Las cubiertas de las sillas deben ser antideslizantes, fáciles de limpiar o lavar, y de una tela que «respire» (permeable a la humedad).
La buena calidad, las fundas duraderas ayudarán a la comodidad y prolongarán la vida útil de la silla.
Es difícil saber exactamente qué silla necesita para su espacio de trabajo. Escríbanos o visítanos en nuestro showroom de Constituyente 1840 para que podamos ayudarlo a elegir la silla perfecta.
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