Diseñando espacios compartidos que brinden más que una apariencia fresca
Hoy gran parte de nuestro trabajo ocurre fuera de la estación de trabajo principal.
El ambiente informal nos atrae, pero a menudo estos espacios no respaldan nuestro trabajo.
Al diseñar espacios compartidos en la oficina, ten en cuenta estos principios de rendimiento:
Privacidad: Proporciona los niveles y tipos de privacidad adecuados necesarios para el trabajo en cuestión, incluida la privacidad visual, acústica y territorial
Postura: Asegurar el cuerpo en una postura apropiada para cada ocasión, ya sea en la sala de estar, trabajo individual, colaboración de equipos, a nivel de taburetes o de pie.
Proximidad: planifica intencionalmente las relaciones entre las personas, sus herramientas, los muebles y el espacio general.
Personalidad: Expresar la marca y cultura únicas de una organización para atraer y retener talento.
Cuando se consideran e implementan estos principios en el diseño de la oficina, suceden cosas buenas:
Mayor productividad: las personas y los equipos pueden trabajar mejor colaborando, socializando o enfocándose
Comodidad psicológica: las personas se sienten bien y quieren usar los espacios.